Hoy no te guardo rencor, fuiste mi maestra y como tal me dejaste marchar en el momento que me creíste preparado para dar el salto a este mundo. Pero mentiría si te dijese que no te odié, de hecho fue mi única fuente de energía durante años.
Los sentimientos de cercanía que experimentaba al estar contigo habían ido tornándose en otros más cercanos al rencor, y por ser justo con tu recuerdo decidí que ese no era el final que te merecías. Ha pasado mucho tiempo...tanto que ya no existe un "nosotros" y que seguramente seamos incapaces de reconocernos a simple vista, hoy todo se ha vuelto indiferencia y es por ello que creo que habrá que escribir un final a esta historia.
Pala en mano, decido no perder ni un minuto más, ya he pensado esta noche en ti más de lo que debiese y he descubierto que lo que creía un acto sin importancia se está convirtiendo en algo vital, pienso en dejarlo todo y volver tras mis pasos, pienso en dejar tus recuerdos enterrados, pero eso sería como permitir que volvieran a arraigar en mi y, entonces nada de lo pasado durante este tiempo hubiese merecido la pena.
No se me ocurre mejor desenlace que acabar con esto como empezó...con fuego,aunque ahora el fuego de la pasión que hacía arder mi corazón con cada beso que te robaba hoy sería el encargado de borrar el más mínimo recuerdo y terminaría con todo lo que significaste para mi...El viento haría el resto alejando las cenizas y esparciéndolas por otros lugares mucho más lejanos restituyendo la serenidad de esta alma en pena...y dándome la oportunidad de volver al punto de partida...